5. Hidrografía

Vientos

Dejemos que el derrotero de las costas publicado por la Armada española en 1810, explique este aspecto:

Entre abril y mayo no se experimenta novedad en la atmósfera, y se goza generalmente de un tiempo hermoso, pero en agosto, setiembre y octubre, hay de ordinario calmas o vientos flojos, y se experimentan también recios huracanes...exceptúense no obstante, la isla de Trinidad, las costas de Tierra Firme, los golfos del Darién y Honduras, y el saco de Veracruz, en el espacio comprendido entre las Antillas Mayores y costa firme, reina con regularidad el viento general del Noreste, mas acercarse a las costas, tienen lugar las particularidades siguientes: en las Antillas Mayores como Puerto Rico, Santo Domingo, Jamaica y Cuba, reina con constante regularidad la brisa o viento de mar de día, y el terral de noche… sirven mucho para navegar al Este  y remontarse a barlovento, cosa que sin ellas, sería impracticable. En las Antillas Menores, como Dominica, Martinica, Santa Lucía, etc., no hay terrales.

En las costas de las Guayanas nunca hay terral… en enero, febrero y marzo los vientos soplan del norte al este noroeste… en abril, mayo y junio, los vientos son del este al sureste. En julio, agosto y septiembre, no hay más que calmas y turbonadas del sur y suroeste. En octubre, noviembre y diciembre hay lluvias continuas y el cielo está por lo general nublado.

En las costas de Caracas, Cumaná hasta Cabo de la Vela, pero desde este cabo hasta punta San Blas, varía la dirección del viento, sopla del noreste y del nornoreste, menos en los meses de marzo, abril, mayo y junio, que se llama al este noroeste. Entonces tiene una fuerza increíble, en términos que es menester capearlo. Estas brisas fuertes, que son muy conocidas por los navegantes de aquellas costas, se extienden por medio canal hasta dos o tres leguas de la costa, en donde pierden mucho de su fuerza, especialmente de noche. [1]

Teniendo presente lo anterior, la experiencia de derrotas permitió la elaboración de una tabla de destinos y tiempos, tomando como puerto base, La Guaira.

Básicamente, el tiempo de derrota empleado entre puertos situados en el Mar de Venezuela y el Caribe variaba según la maniobra empleada.

 

Velocidad y tiempo

Según Jorge Juan, tres resultantes vectoriales son el producto de los efectos del viento sobre el barco: el primero, que corre a través de la quilla, llamado directo. Otro es perpendicular a ésta. El tercero es el resultante de los dos anteriores, que es oblicuo, que es la manera real como se desplazaban los buques a vela. [2]

Las mejoras a que hemos hecho referencia incidieron en el mejor dominio de los efectos del viento y las velocidades tanto en navegación de bolina como a un largo:

 

Tabla I

Rendimiento estimado buques a vela  en grandes travesías

Navegación

A un largo

Bolina

Velocidad

Máxima

Mínima

Máxima

Galeón (1650)

7 nudos

6 n.

2 – 3 n.

Navío

(1730)

14 n.

11 n.

8 n.

Navío

(1750)

14 n.

12 n.

9 n.

       [3]

 

Según los datos recopilados anteriormente, hubo avance sustantivo en la construcción naval para el mejor aprovechamiento de los vientos, y de la capacidad para navegar al través, a un descuartelar, o a la relinga.

 

La normal derrota del sistema de flotas, habría sido la siguiente:

Figura XI. Sistema de flotas y tiempo empleado en la derrota (S. XVI-XVII).

 De acuerdo a la figura (XI), el tiempo empleado en la derrota entre islas Canarias y algunas de las islas del Caribe Oriental más cercana a Trinidad, era entre 25 y 30 días, eso nos da una velocidad promedio de 5 a 6 nudos, lo que satisface las velocidades de la tabla (I).

Pero, nunca faltan los peros, el comportamiento cinemático de las goletas y bergantines, los buques más utilizados en el Caribe, de acuerdo a las tablas (II) y (III), combinada con la información descrita en el acápite siguiente, nos indican que las velocidades de crucero desarrolladas en el Mar de Venezuela,  no eran en promedio, superiores a los dos nudos en navegaciones a un largo, y no mayores de un nudo en ceñida. Esta proporción aumentaba casi el doble al navegar por la banda norte de la cornisa insular, y en las derrotas hacia y desde las Antillas Mayores.

Si la derrota requería una navegación de bolina al puerto de destino, el tiempo solía ser entre 2 y 4 y veces superior, que una realizada a un largo en dirección al puerto de salida, tal como observamos en la tabla de tiempos y distancias diseñada para el Reglamento de Transporte entre Capitanías de 1800:

 

Tabla II

Distancias y tiempos entre puertos

Puerto de destino

Días de ida

Día de vuelta

Puerto Cabello

2

7

Barcelona

8

2

Cumaná y Margarita

10

3

Trinidad

15

4

Guayana

33

10

Puerto Rico

12

7

Santo Domingo

5

10

Coro

3

15

Maracaibo

6

30

Río Hacha

6

40

Santa Marta

6

40

Cartagena

8

60

Portobelo

10

60

Nicaragua

10

60

Trujillo

12

60

Veracruz

20

60

N. Orleans – Mobila- Pensacola

30

40

Cuba

10

30

Habana

30

40

[4]

Si prestamos atención, podemos aprender algunos detalles como, por ejemplo, que los modelos de rendimientos teóricos para navíos y galeones de la tabla (I), fueron diseñados para largas navegaciones, lo que permitía un uso de la mayor superficie vélica posible y de vientos con mayor fuerza. 

En el circuito del Caribe y del Mar de Venezuela, espacios cerrados por el Arco de Ulises, o islas del Caribe Oriental, el comportamiento cinemático exigía el uso de bordadas tanto a un largo como en ceñida, y esto tiene una razón. Observemos la tabla (III).

 

Tabla III

Rendimiento estimado de bergantines y goletas en el Mar de Venezuela y circuito del Caribe

Puerto Cabello

 

Distancia

Tiempo

Velocidad

Nudos

A un largo

70, 5 MN

48 horas

1,5 milla/hora

1, 5 nudos

De Bolina

168 horas

0,4 milla/hora

0,4

                   Margarita

 

 

Distancia

Tiempo

Velocidad

Nudos

A un largo

190 MN

72 horas

2,36 milla /hora

2,36

De Bolina

240 horas

0,7 milla/hora

0,7

Puerto Rico

 

Distancia

Tiempo

Velocidad

Nudos

A un largo

550

168

3,27 milla/hora

3,27

De Bolina

288

2 milla /hora

2

Trinidad

 

Distancia

Tiempo

Velocidad

Nudos

A un largo

345

96

3,5

3,5

De Bolina

360

0,96

0,96

La Vela de Coro

 

Distancia

Tiempo

Velocidad

Nudos

A un largo

203

72

2,9

2,9

De Bolina

360

0,6

0,6

Maracaibo

 

Distancia

Tiempo

Velocidad

Nudos

A un largo

412

144

2,87

2,87

De Bolina

720

0,6

0,6

 

En estos rendimientos influían las variables siguientes:

1.    Estación del año.

2.    Velocidad del viento reinante de acuerdo con la latitud.

3.    Superficie vélica desplegada y su tipo. Esto tiene un cálculo particular.

4.    Ángulo con que el viento hiere las velas.

5.    Navegación de crucero, en cuyo caso, llevaría un andar sin mayores apuros, o a la caza de una presa, que obliga a la largada del mayor velamen posible.

 

                       Figura XII. Derrota Cuba- Cumaná- La Guaira



Las distancias entre la Guaira y Puerto Cabello es más o menos recta, pero, hacia Margarita exigía algunas bordadas, y en el caso de la navegación entre Puerto Rico y La Guaira, las bordadas serán mayores, porque una justa y derecha, con la mayor seguridad haría que el buque sotaventeara, lo dificultando la remontada y alargando la derrota. En el acápite siguiente describiremos las bordadas necesarias para un buque que navegaba entre los citados puertos.

De tal manera, que se comprueba el hecho de que colocar apostaderos y fortificaciones a barlovento, otorgaba una preeminencia estratégica inestimable, para el control comercial de rutas, y de la ventaja en combates y encuentros navales.


Corrientes

El mar de Venezuela tiene diversas características distintivas:

1.    Morfología. Ejes de plegamiento, dislocaciones tectónicas y depresiones que se prolongan en dirección este-oeste, origen de las corrientes.

2.     Grandes profundidades en la isla de Bonaire y el golfo de Cariaco[5].

Las variaciones de las corrientes marinas son de especial atención en el Caribe en general, no en el Mar de Venezuela. Según las observaciones realizadas a bordo de  la fragata Leocadia, del mando de José Ezquerra, entre 1788 y 1789, la dirección de las corrientes son  de oeste 5º sur ;  sur 40º oeste;  oeste ; sur 52º oeste; sur 36º oeste. Esto quiere decir que las corrientes llevan una dirección sin grandes cambios con tendencia al oeste. La velocidad promedio es de 1,4 milla por hora.[6]

Por otro lado, la influencia de las corrientes si es importante en el denominado Saco de Maracaibo, porque lleva dirección contraria al viento.[7]


[1]Derrotero de las islas, de Costa firme y Seno mejicano, Madrid, Imprenta Real, 1810. Resultado impreso de la comisión del Atlas iniciada en 1794, pp.

[2]Jorge Juan y Santicilia, Examen marítimo teórico práctico…pp. 234.

[3]Jorge Juan y Santicilia, Examen marítimo teórico práctico…pp. 235-257. Enciclopedia General del Mar. Madrid, Ediciones Garriga, 1958, T. IV, pp. 830-832. Cerezo Martínez, ”Rutas marítimas españolas en el siglo XVI” en I Jornada de Historia Marítima, España y el Ultramar Hipánico hasta la Ilustración. Madrid, Instituto de Historia y Cultura Naval, 1989, p. 74

[4] AGI. Caracas, 96. Reglamento de transporte de oficiales de los puertos de esta Capitanía,  para todos los de la Península y de América, 31 de julio de 1800.

[5]Valentina Sipolls Maier, Delimitación de áreas marinas en el Golfo de Venezuela y el Archipiélago de los Monjes, tesis de grado, Salamanca, Universidad de Salamanca, 1984, p. 232.

[6] Derrotero de las islas de Costa  Firme …, p.  32.

[7] Este fenómeno se debe a la salida de aguas del lago de Maracaibo hacia el golfo.